Metodologías

Publicado el octubre 2nd, 2018 | por webmaster

0

Los múltiples costos de los productos rechazados por mala calidad

Un objetivo esencial de cualquier programa de mejora continua es la reducción de los productos rechazados por mala calidad. El pensamiento más común y estereotipado en cuanto al costo de descartar productos es que esto se traduce a tiempo, materiales y dinero. Y aunque estas son las categorías principales de costo, son solo la punta del iceberg. El costo está muy mal juzgado, a menudo está subestimado, pues afecta a muchas más áreas dentro de nuestras empresas de lo que creemos. A continuación encontraremos los múltiples costos de las devoluciones por mala calidad divididos en estas tres categorías.

Las devoluciones por mala calidad nos cuestan tiempo

El precio que tenemos que pagar en materia de tiempo por los productos defectuosos se traduce en resolución de problemas, y en este caso es muy importante contar con un plan, pues resolver estas incidencias durante una crisis es costoso, ineficiente y nos quita tiempo que podemos invertir en otras cosas.

Al tener devoluciones de piezas también tendremos que volver a programar el uso de materiales, pues si las partes defectuosas no de pueden rehacer, habremos de usar nuevo material. Si no lo tenemos en la planta, tendremos que ordenarlo, lo que nos quitará tiempo y retrasará el trabajo.

De igual forma, al tener que preparar de nuevo el equipo y repetir el proceso una vez más nos toma un trabajo innecesario y es costoso a largo plazo.

Finalmente, cuando tenemos defectos, debemos volver a programar el horario de entrega. Es muy importante que terminemos el trabajo a tiempo con el fin de mantener la satisfacción de nuestros clientes y se queden con nosotros.

El desperdicio de material es otro costo de los defectos de calidad

Cuando el material es rechazado y no se puede rehacer, tenemos que echar mano de más materia prima, lo cual por lógica es más costoso. Y en muchos casos, la producción de la pieza debe empezarse desde el principio. Si podemos rehacer la pieza, es posible que el proceso sea más corto, y aunque nos seguirá representando un costo en tiempo y labor, el resultado será menos material desperdiciado.

La pérdida de dinero asociada a los productos defectuosos

Tanto el tiempo como el material gastados juegan un rol en el costo financiero de los defectos. Y este es tal vez el precio más tangible de los productos rechazados, pues la rentabilidad es una preocupación para la mayoría de empresas fabricantes.
Como vimos anteriormente, el costo real de permitir productos defectuosos dentro de nuestra producción es mucho más que solo tiempo, material y dinero. Y aunque lo dividimos dentro de estas tres grandes categorías, el precio que pagamos al final es una menor satisfacción de nuestros clientes.

Uno de los objetivos que más se priorizan en la mayoría de las empresas fabricantes es mantener a sus clientes felices entregándoles productos de la más alta calidad dentro del tiempo planificado. Los productos defectuosos juegan un papel importante en no permitir que las compañías alcancen esta meta. Por esta razón, es crucial que tomemos acciones preventivas y reduzcamos los rechazos en la medida de lo posible si queremos un proceso de fabricación exitoso.

Softwares de Inteligencia Artificial como el de iLEAN nos ayudan a predecir y planificar mejor nuestros procesos de producción al integrar las diferentes metodologías de Lean Manufacturing junto con herramientas de Industria 4.0, lo que nos lleva a potenciar el trabajo de nuestros colaboradores dentro de la planta. Si quieres conocer más sobre los diversos métodos Lean, pincha aquí para más información. Y no olvides seguirnos en nuestras redes sociales, FacebookTwitter y LinkedIn para estar conectados.

 

*Fuente: Worximity.


Sobre el Autor



Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Volver Arriba ↑