Publicado el octubre 19th, 2018 | por webmaster
0Nuestra predicción acerca de la completa adopción de la Industria 4.0 en el sector
Vistos los tres cambios tecnológicos que estuvimos mencionando en los artículos pasados (que puedes ver aquí), podemos intuir cómo una vez se desarrollen y sobrepasen esa masa crítica que, como veíamos antes, pone a disposición del gran público los avances tecnológicos, van a adelantar de manera notable los esfuerzos en el sentido de la Industria 4.0 que se están desempeñando en la actualidad.
Es más, en mi opinión, estimo que cuando dos de estos tres factores se den el cambio se producirá en menos de 24 meses:
1- Robots autopilotados que permiten el traslado automatizado de los materiales por la planta cuyo costo esté por debajo de los 10000 dólares.
2- Aplicación de sistemas de Inteligencia Artificial que permitan una predicción y anticipación a problemas de producción y sirvan como asistentes de ejecución de trabajos industriales.
3- Implementación de Brain-Computer Interfaces, es decir, sistemas de control de maquinaria a través de interfaces que conecten los cerebros a los dispositivos.
Todos ellos están en ese límite del nivel freático que les permitiría dar la bajada en costo necesaria para expandirse y permear al sector industrial de una manera económicamente viable, convirtiéndose en productos masivos.
Entonces, ¿por qué, al estar tan cerca de suceder, no lo hemos podido vislumbrar de algún modo?
No somos capaces de verlo llegar porque tenemos el foco en el lugar equivocado:
Como pudimos ver anteriormente, la tecnología que estamos viendo como más disruptiva no tiene como mercado el mundo industrial, sino el consumidor medio, entonces los cambios se producen antes en el ámbito doméstico, lo que no nos ayuda a anticipar las consecuencias que estos cambios pueden suponer en el sector industrial, ya que antes siempre había sucedido al revés.
En este punto, hemos de referirnos nuevamente al ejemplo que planteamos con anterioridad respecto a tecnologías no diseñadas para el mundo industrial, que luego fueron absorbidas por este debido a su gran alcance y potencial.
Observemos otra vez el caso de WhatsApp. Fue una aplicación pensada para compartir mensajes y todo tipo de experiencias en el entorno social, sin embargo, con el pasar del tiempo se pudo ver que en la industria también tenía una enorme utilidad. Pronto empezamos a ver grupos de trabajo que hacían parte de cualquier proceso que sostenían conversaciones, planeaban reuniones o visitas a través de WhatsApp… en fin, extrapolando el uso que le daban a la app en su vida personal a su trabajo. Y esta cotidianidad de su aplicación hizo que ninguno de nosotros pudiera darse cuenta de que poco a poco se estaba convirtiendo en un gigante, es más, ni siquiera yo, que tengo una experiencia de más de 20 años en el sector industrial y tecnológico, lo vi venir.
Atendiendo a la realidad industrial que vemos en Hannover, la tendencia es la automatización al máximo nivel posible, la robotización, la sustitución del ser humano casi por completo, dejando solamente los pocos operarios necesarios para manejar esas fábricas robotizadas.
Sin embargo, los tres factores clave mencionados no aparecen sobre el tablero en el que se dibuja esa realidad industrial a la que se tiende, sino que, como hemos dicho, se están gestando en el ámbito doméstico, lo que no nos ayuda a vislumbrar ese más que probable futuro del sector.
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