El “Terminator Bueno”, tecnología que potencie al ser humano en la planta

Los que ya contamos con la suficiente experiencia dentro del campo de la tecnología industrial nos estamos enfrentando a un panorama en el que tenemos que plantearnos de verdad una reflexión ética en torno no tanto al cambio que afrontaremos con la llegada de la Industria 4.0, sino a la velocidad a la que este se va a producir.

Se espera que la automatización y la sustitución de seres humanos tenga un gran impacto en la conservación y generación de empleos, lo que nos puede llevar a una crisis económica y social de enormes proporciones si no nos organizamos y hacemos algo al respecto.

Hablando en específico de lo que podría ocurrir en México, se estima que el 19% de los trabajos se verán afectados por la implementación de sistemas de Inteligencia Artificial en un sinnúmero de sectores industriales, lo que quiere decir que esto podría acarrear consecuencias negativas para 9.8 millones de personas en el futuro, sin contar a sus familias que dependen de ellas de forma directa.

En este escenario, nos encontramos con que las fábricas son nuestra última línea de defensa, y en ese sentido, debemos hallar la manera de desarrollar tecnología que potencie a los seres humanos en las plantas, en lugar de sustituirlos: algo que aquí hemos denominado como el “Terminator Bueno”.

Así como lo dijimos anteriormente, la capacitación en estas tecnologías que han de potenciar el trabajo de los seres humanos dentro de las fábricas es muy importante en el marco de la entrada de la Cuarta Revolución Industrial al sector. Sin embargo, antes de pensar en el entrenamiento, tenemos que idear la manera en la que vamos a crear, desplegar y posibilitar el uso de dichas tecnologías.

Es esencial que las empresas fabricantes, sin importar su tamaño, alcance o escala, logren adaptarse de la mejor manera a la transformación que se va a suscitar en materia de procesos de producción, teniendo en cuenta que la demanda en el mercado también cambiará, por lo que es tan primordial conocer las distintas herramientas que ofrece la Industria 4.0 para lograr personalizarlas, por así decirlo, a las necesidades específicas de la organización y obtener los mayores beneficios.

Por otra parte, en el futuro hacer nuestro trabajo de una manera eficiente, es decir, lograr resultados, será más crucial que nunca si queremos conservar un lugar dentro del mercado. Es por ello que es tan importante que las compañías empiecen a familiarizarse con la filosofía de Lean Manufacturing, si no lo han hecho ya, y consideren implementarla dentro de sus procesos empresariales con el fin de aumentar la productividad.

Al combinar las metodologías de Lean Manufacturing con herramientas tecnológicas de Industria 4.0, como Inteligencia Artificial, Big Data o Machine Learning, podemos llevar a la fábrica a ese nuevo nivel de eficacia que podrá permitirnos competir frente a una planta en la que ya hubo una sustitución dura de seres humanos por máquinas y solo esté controlada por robots.

Las fábricas que logran adoptar este modelo, al que hemos llamado Lean Manufacturing 4.0, logran una mayor rentabilidad frente a una fábrica totalmente manejada por robots, ya que nuestra naturaleza humana nos permite adquirir un mayor nivel de flexibilidad, que nos posibilita adaptarnos de una mejor manera a las demandas cambiantes del mercado.