De qué manera las tecnologías emergentes impulsarán la Industria 4.0

Máquinas cuyos sensores detectan de forma autónoma cuando necesitan cambios de piezas. Sistemas de producción que realizan su propio control de calidad durante la operación, reduciendo el tiempo de inspección. Robots que reconocen y mueven elementos por sí solos… Escenarios como estos se están convirtiendo de forma gradual en una realidad dentro de la producción industrial.

Esto se fundamenta en tecnologías emergentes como la inteligencia artificial y el edge computing, que ofrecen oportunidades inmensas para las industrias porque abren la puerta para nuevos modelos empresariales y un mayor potencial de productividad. Esto hace que sean indispensables para asegurar la competitividad de las organizaciones en el mundo del mañana.

Los datos son la base de las tecnologías emergentes

Las tecnologías del futuro estarán fundadas en la disponibilidad de los datos, la cual es abundante gracias a la transformación digital de la industria. Las soluciones digitales ya reflejan cada paso en la producción industrial en forma virtual, con lo que se conoce como un gemelo digital.

Es más, estos pasos se están mejorando y entrelazando entre sí de manera digital, para producir extensos grupos de datos. Las tecnologías futuras ahora permiten analizar y explotar estos datos en formas completamente nuevas.

El ejemplo de la inteligencia artificial muestra claramente lo que esto significa. La IA no es algo nuevo en sí misma. Muestra de ello es Siemens, que instaló redes neuronales en acerías a partir de los años noventa. Sin embargo, la tecnología ha hecho enormes progresos desde entonces.

Por otro lado, la potencia de cálculo ha aumentado muchas veces, los algoritmos han mejorado mucho, el hardware en las fábricas funciona mejor y la transferencia de datos se ha acelerado enormemente. Eso significa que el creciente volumen de datos disponibles se puede recopilar y analizar muchas veces más rápido y de manera más completa que antes, y el análisis de datos se ha vuelto mucho más sofisticado.

Preparando a la industria para las tecnologías futuras

En una plataforma como esta, los usuarios pueden hacer más que recopilar y ver datos, también pueden analizarlos utilizando algoritmos de inteligencia artificial y hacer que sus procesos de producción sean más eficientes sobre esa base.

Por ejemplo, los algoritmos de inteligencia artificial en la planta Amberg de Siemens utilizan datos de las fresadoras para indicar cuándo los husos de las máquinas están llegando al final de su vida útil y deben ser reemplazados. Eso mantiene al mínimo el tiempo de inactividad no programado, ahorrando costos de alrededor de 10.000 euros por máquina cada año.

Por otra parte, la inteligencia artificial no necesariamente puede ejecutarse solo en plataformas de IoT en la nube. Gracias a las computadoras de mayor potencia y al hardware de mayor rendimiento, también puede operar cada vez más en la propia fábrica, es decir, de forma directa.

Esta tecnología es conocida como edge computing. Su ventaja es que a través de esta, las aplicaciones pueden correr in situ, con cortos caminos de transferencia y procesamiento de datos en tiempo casi real. Además, los datos relevantes para la operación permanecen protegidos dentro del entorno local, ya que la conexión a la nube solo se necesita para actualizar las aplicaciones de inteligencia artificial.

La inteligencia artificial también está dando paso a nuevas posibilidades para sistemas autónomos de gestión. Para tomar solo un ejemplo: solía ser necesario involucrarse en la tarea, que requiere mucho tiempo, de entrenar robots con objetos conocidos, definir cada movimiento y programarlo con meticuloso detalle.

Sin embargo, la inteligencia artificial permite que los sistemas de gestión reconozcan incluso objetos desconocidos y calculen los mejores puntos de agarre para ellos. Esta capacidad es aplicable en líneas de ensamblaje totalmente automatizadas para productos complejos como los automóviles, líneas que deben ser tan flexibles como puedan. Para este fin, los robots deben además ser capaces de localizar y mover diferentes componentes.

Estas tecnologías futuras ya son una realidad. A pesar de ello, siguen teniendo un mayor potencial de hacer que la producción sea más confiable, eficiente y flexible. Es la única manera de satisfacer la demanda por productos cada vez más personalizados, elaborados de una forma más rápida, con mayor calidad y a un precio competitivo.

El éxito en el futuro requiere de trabajo en equipo

Algo que es importante recalcar en este contexto es que las tecnologías futuras siempre requieren nuevos caminos de investigación y desarrollo. Y solo pueden ser implementadas de una forma exitosa cuando las compañías, sin importar su tamaño o locación, trabajan en equipo, haciendo un esfuerzo equitativo.

La clave en esto es combinar la experticia digital e industrial. Los sectores específicos han acumulado un profundo conocimiento de sus aplicaciones industriales durante décadas, y ese entendimiento es indispensable para aplicar soluciones digitales, inteligencia artificial, edge computing y sistemas autónomos de gestión en entornos industriales. Además, este complejo tema requiere las habilidades de una gama muy diversa de actores empresariales, científicos y gubernamentales.

El gobierno debe impulsar la investigación, la infraestructura, la seguridad y la educación en tecnología

Es importante contar con el impulso regulatorio correcto desde el gobierno en una forma coordinada. Existen cuatro aspectos que son cruciales en este sentido.

Primero, se necesita un ecosistema en el que las innovaciones puedan crecer, a través del apoyo y la inversión para la investigación tecnológica. Es la única manera en que las tecnologías del futuro pueden convertirse velozmente en productos útiles.

Segundo, una infraestructura amplia y acceso rápido al internet son requerimientos básicos. La Industria 4.0 necesita no solo banda ancha, sino tiempos de transferencia muy cortos, combinados con una disponibilidad máxima. Es indispensable para el futuro de la industria. Ahora bien, ¿cómo podría una pequeña o mediana empresa obtener acceso al futuro digital si en su región no se cuenta con el acceso adecuado a Internet? Es ahí donde el gobierno tiene que actuar.

Tercero, la seguridad tecnológica es esencial para el éxito de las iniciativas en Industria 4.0. La digitalización y la seguridad cibernética deben ir de la mano. Esta es la razón por la que a principios de este año, Siemens desarrolló algo que se conoce como una Carta de Fideicomiso para la ciberseguridad (Charter of Trust). El objetivo fue establecer estándares generales para la seguridad cibernética que sean de vanguardia. Hoy en día, esta premisa es apoyada por 16 compañías y organizaciones.

Por último, todos los niveles de educación tienen que ser reorientados hacia los nuevos desarrollos digitales. Expandir las habilidades en Tecnología de la Información, software, programación, comunicaciones, seguridad y análisis de datos será indispensable para las futuras aplicaciones industriales.

Esto no es algo que se va a lograr de la noche a la mañana. Tenemos que llevar a los trabajadores junto con nosotros en este camino hacia el futuro. Esta es la única forma en que podremos aprovechar las grandes oportunidades que estas tecnologías futuras tienen para ofrecer.

Las tecnologías futuras deben cumplir un propósito social

En medio de todo esto, las tecnologías nunca deben tomarse en consideración de forma aislada. Por supuesto que tienen que ayudar al éxito económico de las empresas. Pero también deben cumplir un propósito social, contribuyendo a mejorar las vidas de las personas.

En última instancia, las personas siempre deben ser el foco de atención. Las nuevas tecnologías pueden hacer que el trabajo de las personas sea menos propenso a errores y crear más espacio para tareas creativas. Pero no tienen por qué reemplazarlas. Más bien, deben ser herramientas que nos permitan mantener el éxito y fortalecer nuestras ubicaciones comerciales.

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Fuente: WEF.