Internet Industrial de las Cosas en la Fabricación: Expectativa vs. Realidad

Hoy por hoy, los fabricantes ya han escuchado mucho sobre la Industria 4.0 y la Internet Industrial de las Cosas (IIoT). Sin embargo, la inmensa mayoría aún se está preguntando si vale la pena invertir en estas cosas o si la expectativa es demasiado alta. Al final del día, la fabricación sigue buscando elaborar productos de alta calidad de una forma más rápida y al menor costo posible.

Alrededor del mundo, muchas plantas tienen más de 20 años de antigüedad. En estas plantas, menos del 14% de las máquinas están conectadas. Esto quiere decir que no cuentan con sensores o algún otro modo de monitoreo que pueda extraer datos acerca de cómo están operando. Las máquinas más antiguas tienen mayor probabilidad de daño, lo que representa 50 millones de dólares de tiempo de inactividad no planificado por año.

La expectativa en torno a la Internet Industrial de las Cosas ha hecho que muchos fabricantes crean que deben invertir inmediatamente en tecnologías disruptivas como el aprendizaje automático, la realidad aumentada o la inteligencia artificial para empezar a obtener beneficios reflejados en una mayor eficiencia. Sin embargo, esto está muy lejos de ser verdad.

Si bien los fabricantes necesitan empezar a construir la infraestructura de conectividad que les permita extraer y aprovechar datos operativos, esto no requiere de una revisión masiva de la noche a la mañana. al utilizar una plataforma en la nube, muchos fabricantes comienzan centrándose en los impulsores empresariales de la IIoT para luego ir construyendo la infraestructura sobre los éxitos iniciales.

El problema de los datos en la fabricación

Un obstáculo importante en cuanto a una mayor conectividad yace en cómo obtener datos a partir de la maquinaria más antigua en la planta. Muchas de estas máquinas no tienen controladores digitales, o requieren reacondicionamiento y sensores externos para extraer datos operativos. A menudo, esto puede causar una mayor dificultad o aumentar los costos, por lo que se hace necesario identificar un retorno de la inversión claro para emprender el esfuerzo. Por esta razón, algunas compañías se enfocan en los equipos que puedan haber causado problemas en el pasado o representan un punto de control crítico que afecta el resultado.

Otro desafío al que se enfrentan los fabricantes es que, incluso cuando los datos están disponibles, hay incertidumbre respecto a qué hacer con estos. Los datos en sí mismos no aporta mucho valor, a menos que haya un modo de interpretarlos y darles sentido. El problema está en que la mayoría de fabricantes no cuentan con científicos de datos que puedan ayudarles en este asunto.

La expectativa en torno a los datos es que los fabricantes que tengan acceso a estos podrán transformar su manera de hacer negocio. Sin embargo, la realidad es que la digitalización solo sienta las bases para la comprensión de lo que está sucediendo con cada activo en particular. Se necesita que exista una manera de visualizar esos datos y convertirlos en acciones.

¿Cuál es la realidad de la IIoT hoy?

Volviendo al objetivo principal de la fabricación, que es elaborar productos de alta calidad del modo más rentable posible, la realidad de la Internet Industrial de las Cosas va más de aprovechar el capital que ya se tiene que de la promesa de un futuro. Se trata de descubrir ideas y oportunidades de mejora

Muchos fabricantes están simplemente obteniendo una mayor visibilidad de lo que está pasando con sus activos existentes. En otras palabras, están mirando cómo pueden mejorar su eficiencia operativa al saber qué está sucediendo en la planta. Están monitoreando líneas de tendencia históricas para conocer, diagnosticar y mejorar el tiempo de actividad y el rendimiento. Están identificando tendencias que puedan transformar de un modo positivo la operativa y la calidad.

Hoy en día, muchos fabricantes saben que la aplicación de la Internet Industrial de las Cosas es una estrategia que no pueden ignorar, ya que existe una gran posibilidad de que, al pasarla por alto, les suceda lo que a muchas compañías de consumo les pasó cuando hicieron lo propio con la Internet. Es importante que las compañías fabricantes comiencen desde ya a establecer las bases de conectividad que les permitirán aprovechar las ventajas de la IIoT, es algo que no puede esperar.

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Fuente: Industry Week.