Muchos tendrán que cambiar de ocupación debido a la automatización

Es una realidad que la automatización tendrá un gran impacto en un sinnúmero de industrias durante la próxima década. Los roles ya existentes van a cambiar, se crearán nuevos y los líderes tendrán que adaptar sus estrategias de contratación y capacitación para cumplir con los nuevos requerimientos del mercado. Del modo en que las compañías y los gobiernos ayuden a los trabajadores a entrenarse y encontrar una nueva ocupación dependerá en gran manera el éxito en la transición.

Por otra parte, también es importante reconocer que los hombres y las mujeres serán impactados de una forma diferente por el cambio, debido a las industrias en que sus trabajos están concentrados y a las barreras potenciales de capacitación.

La automatización crea riesgos y oportunidades para hombres y mujeres de distintas maneras, debido a la naturaleza de género del trabajo en diferentes culturas. En muchos países, las mujeres representan más del 70% de los trabajadores en asistencia sanitaria y social, pero menos del 25% de los operadores de maquinaria y trabajadores manuales.

La investigación lanzada este mes en la conferencia Women Deliver, en Vancouver, analizó los escenarios de automatización y crecimiento del empleo de aquí a 2030 y su impacto en mujeres y hombres.

Si la automatización se desarrolla en la misma escala que las oleadas anteriores de nueva tecnología, un promedio del 20% de las mujeres que trabajan actualmente, o 107 millones en los diez países estudiados podrían ver sus empleos desplazados por la automatización para 2030. Para los hombres, las cifras son del 21% o 163 millones en el período hasta 2030.

En los Estados Unidos, las cifras son más altas. El 24% de las mujeres empleadas y el 26% de los hombres, debido a que los salarios promedio más altos pueden hacer que la automatización sea más atractiva económicamente. Hubo diez países, seis economías maduras y cuatro emergentes, cubiertas por la investigación, que representan más del 60% del PIB mundial y más del 50% de la población mundial.

Esto demuestra que tanto las mujeres como los hombres podrían experimentar una disrupción significativa durante la próxima década, y que los tipos de roles que la van a vivir serán diferentes. Las mujeres podrían ver más de la mitad de sus empleos sustituidos en servicios y roles de apoyo administrativo, mientras que alrededor del 40% de los empleos de hombres reemplazados podrían estar en operación de máquinas y trabajos manuales.

Pero también podría haber una mayor oferta de empleos, a medida que aumenta el consumo y los gobiernos y las empresas hacen inversiones. También hay oportunidades específicas para las mujeres a medida que se crean nuevos roles. La atención médica, que está creciendo de forma rápida en todo el mundo y donde las mujeres están bien representadas, podría representar una cuarta parte de los empleos ganados para las mujeres. Para los hombres, la manufactura aún podría representar el 25% del nuevo empleo, sobre todo en economías emergentes, ya que los salarios promedio en esas economías son más bajos, lo que probablemente lleve a una adopción más lenta de la automatización.

A medida que se abren estas nuevas oportunidades, muchas mujeres y hombres necesitarán cambiar de ocupación y volver a capacitarse en consecuencia, por lo general en una de mayor habilidad, para encontrar trabajo. A nivel mundial, es posible que entre 40 millones y 160 millones de mujeres tengan que hacer la transición entre ocupaciones, dependiendo del ritmo de la automatización.

Cambiar de ocupación será más desafiante para las mujeres. En todo el mundo, las mujeres realizan tres veces más trabajos de cuidado no remunerados que los hombres: compran, cocinan, limpian y cuidan a los niños. También tienden a tener menos posibilidad de movilizarse si encontrar un trabajo requiere reubicarse y tienen menos acceso a la tecnología.

Según la investigación, 184 millones de mujeres menos que hombres en países de ingresos bajos y medianos poseen un teléfono celular, y los hombres son 33% más propensos que las mujeres a tener acceso a internet. Las mujeres también tienden a trabajar menos en tecnología y tienen aproximadamente el 35% de los títulos orientados a este campo, que será más importante en el futuro del trabajo. Menos del 20% de los trabajadores de la tecnología en muchas economías maduras son mujeres.

En la India, por ejemplo, alrededor del 60% de las mujeres trabajadoras se encuentran en la agricultura de subsistencia, en gran parte en las zonas rurales. Dada la cantidad de partes del trabajo agrícola que se pueden manejar a través de la automatización, las agricultoras indias necesitarán cambiar de ocupación. Para hacerlo, necesitarán obtener un nivel más alto de educación (probablemente una escuela secundaria) y tal vez deban mudarse de las áreas rurales a las ciudades para encontrar nuevos empleos.

Hasta uno de cada cinco empleos desplazados por la automatización y hasta uno de cada cuatro trabajadores actuales necesitarán volver a capacitarse para cambiar de ocupación. Si bien esto suena desalentador, existe un potencial lado positivo. Los trabajos restantes del futuro serán mejor pagados y probablemente más atractivos. Las enfermeras, por ejemplo, pasarán menos tiempo recopilando datos y más tiempo en el cuidado de los pacientes y con sus colegas.

También se podrían crear ocupaciones completamente nuevas. Para 2030, hasta el 9% de los empleos en los Estados Unidos podría serlo. En los últimos años, la cantidad de científicos de datos, administradores de redes sociales, administradores de recursos y sostenibilidad y otros puestos que no existían hace unos años, ha comenzado a crecer.

Estos trabajos presentan una oportunidad lucrativa para muchos trabajadores. Sin embargo, la mayoría de estos empleos, el 60% en los Estados Unidos, han estado en campos dominados por hombres, y hay algunas pruebas que sugieren que los hombres son mucho más propensos a ocupar trabajos más orientados a la tecnología y mejor pagados, como sugiere la investigación de David Autor.

Para navegar la transición hacia la automatización con éxito y garantizar que los hombres y las mujeres tengan que necesitan, las organizaciones deben evaluar sus programas de reclutamiento y capacitación ahora. Los programas deben tener en cuenta las barreras adicionales que las mujeres pueden enfrentar. Por ejemplo, garantizar que tengan cuidado de niños disponible y un transporte seguro ayudará a aumentar la inscripción de mujeres.

Las mujeres han progresado en el entorno laboral durante las últimas décadas, pero si las 160 millones que serán reemplazadas por la automatización no pueden pasar sin problemas a una nueva ocupación, perderán terreno y su proporción disminuirá en la fuerza laboral.

Para los líderes que reconocen cada vez más los beneficios de la diversidad, equipar a mujeres y hombres con las habilidades que necesitarán en la era de la automatización es una prioridad vital.

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Fuente: Forbes.